Barclays mantiene su previsión para el crecimiento real de la economía española en el 4,3% para 2021, en el 4,7% para 2022, y en el 3% en 2023, según ha señalado en su informe publicado este miércoles sobre la economía española.
«España va a la zaga de sus pares en la recuperación. Vemos poco probable que las causas de esta debilidad (el débil consumo de los hogares, un sector de la construcción con problemas y una lenta recuperación del turismo) cambien de rumbo a corto plazo», ha advertido el equipo de Research de Barclays.
Los expertos apuntan a que en el tercer trimestre de 2021, la economía española seguía estando 6,5 puntos porcentuales por debajo de su nivel anterior a la crisis, mientras que el resto de la zona euro se había recuperado en líneas generales hasta sus niveles de 2019.
Esto se debe a la débil dinámica del consumo, el estancamiento del sector de la construcción cerca de su mínimo de 2020 y a una recuperación «parcial» del turismo en verano, ya que persistió cierto grado de restricciones en el marco de una propensión limitada por viajar.
En este sentido, los expertos consideran «poco probable» que estas vulnerabilidades se disipen por completo a corto plazo. Aunque el exceso de ahorro sigue siendo elevado, lo que respalda la recuperación del consumo, el aumento de los casos de Covid-19 y la actual crisis energética hacen dudar de que vaya a producirse una gran aceleración del consumo a corto plazo.
Además, consideran que la inversión en construcción, que a medio plazo se beneficiará de las importantes inversiones procedentes del Next Generation EU (NGEU), se enfrenta actualmente a un rápido aumento de los costes, al endurecimiento de las condiciones crediticias y a posibles restricciones legislativas (por ejemplo, un límite a los alquileres).
Por último, los expertos indican que las exportaciones de viajes –que constituyen un 16% del total de las exportaciones españolas– seguirán probablemente rezagadas ante la prolongación de las restricciones del Covid-19, mientras que los expertos en turismo no esperan que se vuelva a la normalidad hasta 2023.
Recientemente, el banco británico informó que registró un beneficio neto atribuido de 5.258 millones de libras esterlinas (6.232 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, lo que supone una mejora de del 303% respecto del resultado contabilizado por la entidad en el mismo periodo de 2020.
La cifra de negocio de Barclays entre enero y septiembre alcanzó los 16.780 millones de libras (19.890 millones de euros), un 0,3% menos, incluyendo un retroceso del 6,9% de los ingresos por intereses netos, hasta 5.843 millones de libras (6.926 millones de euros), mientras que los ingresos por comisiones aumentaron un 3,7% interanual, hasta 10.937 millones de libras (12.964 millones de euros).