Bankia, presidido por José Ignacio Goirigolzarri, trabaja para dar forma a su nuevo Plan Estratégico 2016-2018, el cual previsiblemente será presentado la próxima primavera, y que tendrá al cliente y la mejora de la eficiencia como claves, dos elementos que ya estaban presentes en el Plan 2012-2015 que la entidad dio por superado el pasado mes de noviembre.
En los últimos tres años, la entidad bancaria ha cerrado un tercio de su red de oficinas de acuerdo con el Plan de reestructuración pactado con Bruselas, algo que no ha sido un obstáculo para «dar la vuelta» a sus cuotas de mercado hasta estabilizarlas, especialmente en créditos, depósitos y fondos de inversión.
En este trienio, Bankia ha conseguido sumar un total de 184.061 nuevos clientes y comercializar un 70% más de productos: mientras que a finales de 2012 el banco comercializaba una media de 17,6 productos en su red, en diciembre de 2015 ya vendía más de 34 productos por persona al mes de media.
También ha unificado su marca y ha invertido 200 millones de euros en remodelar sus oficinas, además de renovar el 70% de sus cajeros con una inversión de 75 millones de euros. De cara a 2016, el banco pretende instalar 1.500 cajeros, de los que un tercio serán nuevos y el resto renovación de antiguos.
Partiendo de esta base, Bankia prepara ahora su segundo Plan estratégico en el que el cliente y sus necesidades ocuparán una parte importante.
«El futuro de nuestra entidad pasa por que nuestros clientes piensen que les facilitamos la vida, que somos útiles para ellos, porque solo así incrementaremos su nivel de vinculación y fidelización«, ha señalado esta semana el presidente de la entidad José Ignacio Goirigolzarri durante la presentación de su nueva estrategia comercial relacionada con la supresión de comisiones a 2,4 millones de clientes.