El fondo estadounidense Cerberus ha entrado en el capital de Deutsche Bank con una participación del 3%.
De este modo, el fondo sería el cuarto accionista del grupo alemán, por detrás del grupo chino HNA, Qatar y la gestora BlackRock.
El movimiento se produce en paralelo al aumento de la participación de Cerberus en Commerzbank, el segundo mayor grupo cotizado germano, donde tiene un 5% desde el pasado julio.
Las acciones de Deutsche Bank han respondido a la entrada en el accionariado de Cerberus con subidas en Bolsa. Al cierre del mercado, el banco ha subido un 1,91% hasta quedarse en los 15,76 euros por acción.
John Cryan, el CEO de Deutsche Bank, ha advertido que la entidad tiene el doble de personal que sus comprables y que los avances tecnológicos deberían permitir a los costes laborales ajustarse a la caída en ingresos que sufre la entidad.
«Empleamos a 97.000 personas», ha señalado Cryan en unas declaraciones a Financial Times, cuando «la mayoría de nuestros grandes pares tienen la mitad de ese número».
Deutsche Bank está en plena reestructuración en la que ha prescindido de 4.000 empleados de las 9.000 personas de las que tiene previsto prescindir antes de que termine 2020.
Cryan considera que muchos de los recortes adicionales podrían venir a través del uso de tecnología para aumentar la eficiencia en los procesos del banco. «Allí tenemos más que ganar», ha reflexionado. «Somos muy manuales, lo que puede hacer que sea propenso a errores y lo hace ineficiente. Hay mucho aprendizaje automático y mecanización que podemos hacer».
El directivo ha reconocido que tanto el personal de oficinas como de backoffice utilizan sistemas de bancos está obsoletos. La entidad está inmersa en una política de contratación cero para reducir los costes.