El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que es el segundo máximo accionista de CaixaBank, votó en contra de la nueva propuesta de remuneración del consejo de administración de la entidad bancaria, que incluye un aumento de los sueldos, aunque ha explicado que la decisión «no tiene nada que ver» con la gestión del banco.
Así lo hizo el FROB en el marco de la Junta General de Accionistas de CaixaBank, que se celebró el pasado viernes en el Palau de Congressos de València, y que en la que se aprobaron todos los puntos del orden del día, incluyendo la política de retribuciones.
La nueva política supone un aumento del sueldo fijo del consejero delegado del banco, Gonzalo Gortázar, del 3%, y del sueldo variable del 47%, con un total del 14,9% si logra todos los objetivos.
Las fuentes del Ministerio han asegurado que están «muy satisfechos» con la gestión de Gortázar y el consejo, pero que el FROB ha votado en contra por su política interna de no aceptar subidas superiores a las que tiene la plantilla del banco.
Durante la Junta y a respuesta de las intervenciones realizadas por los sindicatos, el presidente de la entidad, Tomás Muniesa, defendió el aumento de sueldo a Gortázar y subrayó que la suma de su salario y el del consejero delegado en 2025 es «equivalente» al de la suma del de Gortázar y el anterior presidente, José Ignacio Goirigolzarri, en 2024.