El consejo de administración de Banco Santander, entidad presidida por Ana Botín, ha aprobado una serie de cambios que simplifican su estructura organizativa, reduciendo de 15 a 11 las divisiones corporativas, y reforzando el control de los riesgos.
Estos cambios contribuirán a una mejora en la capacidad de respuesta al cliente y a superar los ambiciosos objetivos financieros y de negocio, según han informado desde Banco Santander en nota de prensa.
Entre los nombramientos aprobados destacan Rodrigo Echenique, vicepresidente del consejo, pasará además a ser consejero ejecutivo de Banco Santander.
José María Fuster, director general del banco y hasta la fecha director de la División de Tecnología y Operaciones, asume la función corporativa de Innovación, reportando directamente a la presidenta del banco. Fuster liderará nuevas estrategias para situar a Banco Santander como una referencia internacional en innovación aplicada a la banca.
En su lugar, Andreu Plaza ha sido nombrado director general del banco y responsable de la División de Tecnología y Operaciones.
Rami Aboukhair, hasta la fecha director general adjunto, ha sido nombrado director general del banco. Reportará a Enrique Garcia Candelas, country head de España, del que también dependen las áreas de Banca Mayorista Global, Riesgos, Control de Gestión y Organización y Costes, y las demás áreas de apoyo de España.
Ante estos ajustes, José Antonio Álvarez, consejero delegado de Banco Santander, ha señalado: “Los cambios aprobados hoy complementan la reestructuración puesta en marcha en septiembre con el cambio en la Presidencia y nos permitirán ayudar a capturar las oportunidades de crecimiento futuro, para lo que estamos implementando una organización más ágil, flexible y descentralizada. Aspiramos a que Santander sea el mejor lugar para trabajar y el mejor banco para nuestros clientes, con una rentabilidad creciente y sostenible para los accionistas y contribuyendo al progreso de las sociedades donde trabajamos”.