Self Bank ha anunciado que de ahora en adelante se llamará Singular Bank, como parte del proceso de transformación por el que la entidad quiere ofrecer más servicios de valor añadido a sus clientes, y espera «comenzar a ganar dinero» a finales de 2022.
Según ha explicado su consejero delegado, Javier Marín, que fuera CEO del Banco Santander en la etapa final de Emilio Botín, ha pronosticado que el banco, controlado por el fondo estadounidense de capital privado Warburg Pincus, seguirá perdiendo dinero en 2020 y 2021, si bien espera entrar en cifras positivas «a finales del siguiente año».
«La pérdida de dinero no me preocupa, lo que me preocupa es llegar a los clientes potenciales, que nos vean como una opción», ha resaltado.
Respecto a una eventual salida a Bolsa, el consejero delegado ha reconocido que «podría ser un tema interesante», aunque ha dado a entender que aún es pronto. Actualmente el banco cuenta con 500 millones de euros en depósitos, 500 millones de euros en valores y 1.000 millones en fondos.
En cuanto a posibles operaciones corporativas, Marín ha pronosticado «oportunidades de consolidación» en el sector bancario, especialmente entre los actores pequeños. «Cuando veamos oportunidades inorgánicas las analizaremos para ver si tienen sentido, financiero y estratégico», ha avanzado.
«El foco es dar un servicio de calidad y distinto donde los clientes se sientan orgullosos de trabajar con nosotros», ha sostenido Marín, que ha fijado el objetivo de «ser el mejor banco de España para cada uno de los clientes».
«Como banco tenemos que brindar una estrategia de 360 grados. Hay que transformar el modelo hacia una plataforma de servicios para darle al cliente soluciones personalizadas basadas en los datos», ha detallado Marín.
En este sentido, Singular Bank ofrecerá tres modelos de relación con el cliente. En primer lugar, el banco contará con la plataforma más digital Self Bank –que conservará la marca– y banqueros en remoto para los clientes más autónomos.
Las otras dos opciones serán las de «asesoramiento singular» con un banquero privado y la «gestión discrecional singular» con soluciones personalizadas. Estas últimas estarán dirigidas a clientes de mayor patrimonio, en torno a medio millón de euros de patrimonio.
Actualmente, el banco se encuentra en un proceso de apertura de oficinas –en Madrid, Sevilla y Zaragoza– y de contratación de banqueros para ofrecer estos servicios.