BBVA ha comenzado a notificar a sus clientes que a partir de septiembre, operaciones como depósitos, pagar un impuesto, una multa, o bien pasar por caja, ya solo se podrán realizar por medio del cajero automático, sin interlocución con los empleados de la sucursal.
Así aparece en las cartas que la entidad bancaria está enviando a su clientela para dar cuenta de que «se van a producir algunos cambios en el funcionamiento del Servicio de Caja».
“Dejarán de realizarse operaciones en ventanilla que supongan manejo de efectivo, tanto monedas como billetes”, señalan las cartas de BBVA.
El ‘banco azul‘ hace una invitación a sus clientes a usar los más de 6.000 cajeros automáticos que dispone en España, y que permiten hacer el 92% de las transacciones de manera sencilla y a cualquier hora.
El grupo bancario argumenta que la desaparición de esta prestación tan tradicional es una respuesta a una actualización de las oficinas a los usos de los clientes, pues el 50% de los cuales son ya digitales. De igual manera, señalan que se trata de una decisión que perjudica a un porcentaje minoritario de sucursales.