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martes, abril 23, 2024
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Novo Banco vende una cartera de activos ‘tóxicos’ en España

Novo Banco vende una cartera de activos 'tóxicos' en España

La sucursal española de Novo Banco ha vendido esta semana una cartera de activos inmobiliarios y préstamos no productivos, con un valor contable bruto a nivel consolidado de 308 millones de euros, a la gestora neoyorquina Waterfall Asset Management, según ha informado la entidad en un comunicado.

La entidad espera que la transacción se concluya en su totalidad a finales de año, una vez que se hayan cumplido todas las condiciones asociadas a la formalización del acuerdo.

Novo Banco ha destacado que esta transacción representa «un paso importante» en su proceso de desinversión de activos no estratégicos, continuando su estrategia de enfocarse en el negocio bancario.

El Novo Banco, entidad heredera del quebrado Banco Espírito Santo (BES), anunció la semana anterior que prevé pedir otros 541 millones de euros para reforzar su capital, aunque la cantidad final dependerá de cómo cierren las cuentas este año.

En un comunicado, el banco, que anunció 400 millones de pérdidas en el primer semestre (el 88,5 % más), explicó que según estas cuentas estima que tendrá que pedir otra inyección de 541 millones.

«La compensación de final de año dependerá de las pérdidas y costas, de las recuperaciones y de las exigencias de capital en vigor en esa fecha», matizó la entidad.

La inyección de capital deberá ser aportada por el Fondo de Resolución, el organismo público a través del cual el Estado portugués posee el 25 % del capital del banco.

El otro 75 % fue vendido al fondo estadounidense Lone Star en 2017.

El Novo Banco fue recapitalizado con 4.900 millones cuando fue creado en 2014 y desde entonces ya solicitó otras dos inyecciones de capital: 792 millones derivados de las pérdidas de 2017 y otros 1.149 por las de 2018.

Parte de esos valores procedieron de créditos del Tesoro portugués, porque el Fondo de Resolución, financiado con aportaciones de todos los bancos lusos, no contaba con capital suficiente para hacer frente a las inyecciones.

Estas inyecciones se realizan a través de un mecanismo incluido en el acuerdo de venta con Lone Star para hacer frente a las pérdidas derivadas de los activos problemáticos de la entidad, que puede pedir hasta un máximo de 3.890 millones en total.

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