Bankia, presidido por José Ignacio Goirigolzarri, ha logrado mantener cerca de 1.250 empleos con salidas consideradas no traumáticas al margen de los 4.500 despidos contemplados en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Las salidas del banco nacionalizado sin pérdida efectiva de empleo alcanzan más del 83% de las propuestas en el proceso de reestructuración.
Bankia marcó el objetivo de adelgazar su plantilla en 1.500 personas sin necesidad de recurrir al despido y así cumplir con el plan pactado con Bruselas. Las autoridades europeas y españolas exigían una reducción de 6.000 trabajadores, de la que 4.500 salidas se materializarán mediante el ERE.
Las fórmulas seguidas por Bankia para minimizar los despidos se articulan mediante la venta de entidades participadas y a través de procesos de externalización de servicios. Con estas medidas, la entidad consigue que todo el grueso de la reducción de personal no se ejecute con la pérdida efectiva del empleo.
La última operación acometida por el banco nacionalizado se ha conocido esta última semana, con la cesión para los próximos diez años del negocio inmobiliario (Bankia Habitat) a una empresa de Cerberus. Este acuerdo implica la cesión de 457 empleados a la nueva entidad.
En este sentido, Bankia se desprendió del 100% de las acciones de su filial de Florida, el City National Bank of Florida, por un importe total de 882,8 millones de dólares. Esta venta aligeró la plantilla del grupo en 435 personas.
Con estas dos operaciones, junto a la venta de Finanmadrid y la sociedad gestora del hotel Westin de Valencia, la entidad dirigida por Goirigolzarri ha logrado ‘salvar’ 1.116 puestos de trabajo.