8 de junio 2011
La consultora ha publicado un informe en el que estima que la banca de España caerá hasta el puesto 14 del mundo en 2050. En la actualidad, se sitúa en séptimo lugar. En los próximos 40 años, siete bancas de países emergentes superarán a la española. Su participación mundial pasará del 4,8% al 1,6%.
El estudio hace una proyección sobre la evolución del sector bancario en las mayores economías del mundo durante los próximos 40 años.
Así, Price Waterhouse Coopers (PwC) asegura que en 2030 la banca española, en función de sus activos, ocupará la décima posición en el ranking mundial y descenderá hasta el puesto 14 en los siguientes 20 años.
De esta manera, en 2009 la banca española tenía 2.230 millones de euros en activos. En 2030 tendrá 2.559 millones y en 2050, 3.401 millones de euros.
Un informe de 2007 de la misma consultora aseguraba que la banca de países emergentes alcanzaría a los del G-7 (los países más industrializados) en el año 2046. Estos países son China, India, Brasil, Rusia, México, Indonesia y Turquía.
Sin embargo, la crisis económica ha hecho que las diferencias entre los sectores financieros de los países más industrializados y los emergentes. Se ha calculado que este nuevo escenario ha adelantado la previsión inicial en 10 años.
El ejemplo más claro de la aceleración del estrechamiento entre bancas lo muestra China. Según PwC, antes de la crisis era previsible que la banca asiática alcanzara en activos a la estadounidense en el año 2043. Ahora, lo hará en 2023 y en 2030 le superará ampliamente, con una suma total de 21.122 millones de euros en activos.
En 2030, además de China, India (4) y Brasil (9) entrarán en el “top ten” de la banca mundial y, en 2050, se unirán además, Rusia (5) y México (9), mientras que países como Reino Unido, Alemania o Francia desaparecerán, entonces, de los cinco primeros puestos del ranking.
Acerca de la recuperación económica, PwC estima -considerando pasadas situaciones similares- que la crisis se superará pasados cinco años.