J.P. Morgan ha recibido la autorización para establecer su subsidiaria en Perú, bajo el nombre de J.P. Morgan Banco de Inversión.
La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) ha sido el organismo encargado de emitir esta autorización a J.P. Morgan para que pueda operar como banco de inversión en Perú.
En julio del año pasado, el directorio de J.P. Morgan acordó establecer esta subsidiaria, después de que en 2013, el Consejo de Gobernadores de la Fed no encontrara ninguna objeción para que la firma estadounidense pudiera extender sus servicios como una empresa domiciliada en Perú.
La entidad financiera ofrece servicios de financiamiento al sector corporativo, asesoría financiera y gestión de patrimonios a nivel internacional.
Desde hace 20 años ha realizado actividades en Perú, compitiendo con la banca corporativa local. No obstante, estas actividades no estaban domiciliadas en el país sudamericano.
J.P. Morgan ha sido una de las primeras entidades en presentar sus resultados financieros del primer trimestre de 2016 en Estados Unidos.
Los ingresos del banco de inversión cayeron 3% interanual, mientras que sus ganancias se redujeron en torno al 7% en el mismo periodo, lo que supone una ganancia de 1,35 dólares (1,17 euros) por acción, ligeramente superior a las previsiones que tenía el mercado.
J.P. Morgan es una de las empresas de servicios financieros más antiguas del mundo. La empresa, con oficinas centrales en Nueva York, es líder en inversiones bancarias, servicios financieros, gestión de activos financieros e inversiones privadas. Actualmente, es la primera institución bancaria de Estados Unidos.