Abanca ha invertido 12,3 millones de euros para modernizar la mitad de sus cajeros automáticos ubicados en Galicia, con el objetivo de colocar equipos de última generación que cuentan con un conjunto de servicios innovadores en la comunidad.
Abanca ha señalado que este proceso tendrá una segunda parte en 2017, con la modernización de otros 257 cajeros y una inversión de 8 millones de euros.
Estos nuevos cajeros se están instalando en el exterior y en el interior de diversas oficinas, y se identifican fácilmente porque Abanca ha ideado una campaña de imagen en la que otorga nombres a los cajeros. “Ola, son o caixeiro 1850AF, pero pódesme chamar Luis”, se puede apreciar en uno de ellos.
Desde la entidad han señalado que la renovación no tiene ninguna relación con el posible cobro de una comisión a los no clientes porque esta estrategia se aprobó a principios de año. La mayor parte de la renovación, 250 cajeros, se realizó en verano, y antes de terminar este año estará completa.
Todos estos nuevos cajeros son táctiles y permiten depositar billetes y monedas, lo que facilita las transferencias y los pagos de recibos con exactitud. Gracias a estos dispositivos, los no clientes tendrán la posibilidad de efectuar depósitos en cuentas de Abanca, y los clientes de la entidad podrán realizar transferencias a cualquier cuenta de cualquier entidad hasta un máximo de 1.000 euros.
Otra de las características innovadoras de los nuevos cajeros es que incorporan la tecnología ‘contactless‘, que permite realizar transacciones sin introducir la tarjeta, ya que funciona con pasar la misma por encima de la máquina. Esta modalidad está funcionando en algunos comercios en las TPV, aunque en Galicia es usada muy poco. A pesar de esto, se espera que se generalice, ya que desde enero todas las tarjetas nuevas que se entreguen contarán con este tipo de tecnología.