HSBC ha ofrecido un pronóstico positivo respecto al futuro del yuan, la divisa de China. La entidad financiera estima que para el 2015, el yuan será una de las tres monedas comerciales más activas del mundo, y antes del 2020 se convertirá en una moneda totalmente convertible.
El experto Qu Hongbin, de HSBC, ha señalado que la evolución del yuan se llevará a cabo en tres etapas: el yuan debe convertirse, primero, en divisa de comercio mundial; segundo, en moneda de inversión; y, por último, en moneda de reserva mundial.
El yuan prácticamente ha cumplido ya la primera fase. De acuerdo con información manejada por la Sociedad para las Comunicaciones Interbancarias y Financieras Mundiales (SWIFT), la divisa de China ha entrado en la lista de las diez monedas más negociadas del mundo.
En los últimos tres años, la negociación del yuan ha alcanzado unos 120.000 millones de dólares (87.580 millones de euros) al día durante 2013. Por otra parte, en esta clasificación el yuan ya ha superado al euro, y se ha convertido en la segunda moneda más utilizada después del dólar.
Los resultados obtenidos durante el mes de febrero de este año ponen en evidencia que el yuan ha ocupado el séptimo lugar en la lista de las monedas más utilizadas comúnmente para los cálculos. En cuanto a este parámetro, la divisa china ha logrado superar al franco suizo.
Hace cuatro años, solamente el 3 por ciento del comercio exterior de China se realizaba en yuanes. Hoy en día, esta cifra ha aumentado seis veces, hasta alcanzar el 18 por ciento.
Qu Hongbin de HSBC ha asegurado que en el 2015, la mayor parte del comercio exterior de China con los países en desarrollo se va a realizar en yuanes. Para el 2020, cinco años después, se estima que el 30 por ciento del volumen total del comercio exterior de China se va a realizar en la moneda china.
A finales del mes de marzo pasado, el Banco de Inglaterra y el Banco Popular de China llegaron a un acuerdo para establecer en la capital británica un centro de liquidación de operaciones en yuanes. Actualmente, Londres acoge el 62 por ciento de los pagos en yuanes fuera de China.
El experto de HSBC considera que el yuan tiene una característica distintiva: la plena convertibilidad. Hoy en día, la divisa china es parcialmente convertible. A diferencia de otras monedas, cuyo curso depende de la oferta y la demanda, el tipo de cambio del yuan es fijado día a día por el Banco Popular de China, con una variación máxima del 1 por ciento. Los expertos señalan que se espera la plena convertibilidad del yuan dentro de dos o tres años.
Qu Hongbin explica que “esto no significa que el yuan vaya a reemplazar al dólar como moneda de reserva dominante, sino que ayudará a crear un sistema de múltiples monedas de reserva, en el que el dólar, el euro y el yuan tendrán su propio papel”.