Goldman Sachs Group Inc. ha cambiado el código de vestimenta para todos sus empleados, por lo que llevar traje y corbata será algo opcional.
Esta medida hace algunos años ni siquiera era imaginable para los banqueros y socios de la firma de Wall Street, que usan habitualmente trajes a medida.
El banco de inversión ha indicado en una nota interna que este nuevo código se debe a “la naturaleza cambiante de los lugares de trabajo, en general, a favor de un ambiente más informal”.
La nota, que se ha enviado a 36.000 empleados, fue redactada por el presidente ejecutivo, David Solomon, junto con el presidente financiero, Stephen Scherr, y el de operaciones, John Waldron.
Conocido como un banco de inversión tradicional, Goldman Sachs siempre ha requerido una vestimenta formal de negocios, pero desde el año 2017 comenzó a relajar su código para los empleados de la división de tecnología y de negocios digitales.
La situación trajo como consecuencia una división visible dentro la fuerza laboral entre quienes vestían de manera más informal y aquellos que llevaban trajes.
Al igual que otros grandes bancos de Wall Street, Goldman Sachs ha estado trabajando para competir con sus rivales y conseguir los mejores empleados. Las empresas de tecnología y los fondos de cobertura a menudo tienen lugares de trabajo y códigos con los empleados que son mucho más relajados.
El anuncio emitido esta semana también estaba destinado a actualizar las políticas del banco a una fuerza laboral más joven. Más del 75 por ciento de los empleados de Goldman Sachs son miembros de las generaciones Millennial o Gen Z, es decir, personas nacidas después de 1981.
El Grupo Goldman Sachs es uno de los grupos de banca de inversión y de valores más grande del mundo. Durante la crisis financiera de Estados Unidos del 2008 y ante la posibilidad de afrontar la bancarrota, el 21 de septiembre de 2008, Goldman Sachs recibió la autorización por la Reserva Federal (FED) para dejar de ser un banco de inversión y convertirse en un banco comercial.