El Gobierno británico ha iniciado la privatización de The Royal Bank of Scotland (RBS) con la venta de una participación del 5,2% en la entidad.
RBS fue rescatado por el Gobierno británico después de la crisis financiera del año 2008, con más de 45.000 millones de libras (64.029 millones de euros).
George Osborne, el canciller del Tesoro, ha aceptado la petición que le ha hecho UK Financial Investments (UKFI), el vehículo financiero que gestiona la participación del Gobierno británico en RBS, para llevar a cabo la primera venta de parte del capital de la entidad en manos del Estado.
Así, UKFI ha iniciado la venta de 600 millones de acciones ordinarias de RBS mediante un proceso de colocación acelerada, gracias al apoyo de Citigroup Global Markets, Goldman Sachs International, Morgan Stanley & Co. International y UBS como colocadores.
Cuando culmine la venta de esta participación, el capital de RBS que se encuentra en manos del Tesoro británico se reducirá desde el 78,3% hasta aproximadamente el 73,2%. Por otro lado, su cartera de acciones ordinarias descenderá desde el 61,3% hasta el 52%.
El pasado mes de junio, Osborne comentó en su discurso anual en Mansion House, que el Gobierno tenía la intención de dar inicio al proceso de privatización de RBS en el corto plazo, tomando el consejo del Banco de Inglaterra.
El Gobierno ha destacado que sólo venderá sus participaciones en entidades financieras siempre y cuando se cumplan sus objetivos de generar el “mayor valor para los contribuyentes”, lograr el máximo apoyo para la economía de Reino Unido y devolver las entidades a manos privadas.