ING Bank ha anunciado que va a desplegar una nueva característica de seguridad para sus clientes, al permitir que utilicen su voz como una contraseña.
Con este sistema, si el cliente llama al banco para hablar con un representante de servicio al cliente acerca de su cuenta, se le pedirá autenticarse a través de una serie de preguntas personales, y en algunos casos incluso se le pedirá una contraseña. Estos métodos son relativamente seguros asumiendo que nadie más conoce esos detalles.
El nuevo mecanismo promocionado por ING Bank se caracteriza porque incluso si alguien ajeno llama con toda la información necesaria, su voz será un claro indicativo de que no es el usuario autorizado.
Esta tecnología es conocida como biometría de voz y está desarrollada por Nuance, mediante su tecnología Nina.
De acuerdo con Nuance, la biometría de voz autentifica sus clientes a través de patrones de voz natural, sin PINs, contraseñas o preguntas. Es un nivel más en la seguridad para proteger las cuentas, ya que no es susceptible a ataques de fuerza y es mucho más conveniente, debido a que a veces los clientes pueden olvidar sus contraseñas.
Gracias a esta nueva tecnología, los clientes podrán iniciar los pagos, bien sea utilizando la biometría de voz (en teléfonos iOS y Android) o reconocimiento de huellas dactilares (en teléfonos iOS con ID Touch).
Esta tecnología ya se ha utilizado en diversos sectores como las oficinas de impuestos, las empresas de telecomunicaciones, entre otras.