El Gobierno recortará un total de 600.000 a 500.000 euros la remuneración máxima que pueden percibir los directivos de bancos que han recibido ayudas públicas.
La Unión Europea está estudiando la posibilidad de que los accionistas de las principales empresas europeas voten sobre los sueldos de altos ejecutivos. De ser aprobadas por el Parlamento Europeo y por los Veintisiete, estas reformas serán divulgadas en otoño.