Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), ha afirmado que existe una posibilidad importante de que Grecia salga de la eurozona.
No obstante, a pesar de que la salida del país heleno representaría un bajón importante para la unión monetaria, no supondría el final de la moneda común europea.
Durante una entrevista para el diario alemán, Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ), la directora gerente del FMI reconoció que «la salida de Grecia es una posibilidad”, justo antes de la reunión de los ministros de Finanzas del G-7 en Dresde (Alemania).
Largarde considera que, si el final de la crisis griega terminara con la expulsión del país heleno del euro zona, tal hecho no sería “ningún paseo” para los miembros de la unión europea, sin embargo también apunta a que probablemente la situación no signifique «el fin del euro».
También, a directora gerente del FMI aprovechó para increpar a las autoridades griegas sobre la proximidad de las fechas límites para llegar a un acuerdo entre el país heleno y sus acreedores, ya que señala que es poco probable que se «alcance una solución global en los próximos días». Aunque reconoce que luego de dos semanas de buenas señales por parte de Grecia, las negociaciones han resultado fortalecidas la semana pasada.
De la misma manera, la ex ministra francesa deja claro que el FMI no tiene previsto asignar nuevos préstamos a Grecia, sin que antes se logre un acuerdo conciso sobre las reformas a seguir, pese el inminente riesgo de la bancarrota del Estado heleno.
Lagarde, sostiene que el FMI no es responsable del destino de Grecia en la unión monetaria, ya que considera que, si el país heleno cumple las concisiones previstas los países del euro y el BCE podrían»dar un poco de espacio para respirar» a los griegos.