JP Morgan asegura que la situación de la economía española es mejor de lo que se percibe, y aunque aún no está fuera de peligro, se empieza a ver una mejoría gracias a los pasos dados «en la dirección correcta».
«Una mirada cercana a España muestra que el país no está de ninguna manera fuera de peligro, pero también que la economía española no sufre ninguna enfermedad fatal. De hecho, ya se han dado muchos pasos en la dirección correcta, con resultados que ya están comenzando a surgir», explica en un informe sobre las empresas cotizadas de pequeña y mediana capitalización.
La entidad estadounidense señala que poco se puede argumentar contra el hecho de que la situación en España es «MALA (con letras mayúsculas) en el presente», ya que la actividad economía está deprimida y no apunta a una recuperación. Así, recuerda que la morosidad está alcanzado niveles récord, al igual que las quiebras de empresas o el desempleo, donde piensa que las cifras reales son bastante menores que las oficiales.
Pese a ello, no cree que España vaya a fracasar en sus esfuerzos y subraya que no tiene un problema «anormal» de deuda en comparación con otros países. Además, agrega que tiene el flujo de caja y la capacidad de pagar sus deudas e invertir en crecimiento.
En este sentido, afirma que, analizando los datos que hay detrás de la actual situación de España, tiene la impresión de que la percepción sobre la economía del país «es peor que la actual realidad de España». De hecho, remarca que muchos indicadores económicos apuntan ya a una tendencia positiva.
En concreto, subraya que media Europa occidental, Estados Unidos y Japón están más endeudados que España respecto al PIB, y subraya que el país tiene más posibilidades que otras economías de aumentar sus ingresos para reducir su deuda, algo que debe solucionar.
Asimismo, JP Morgan también reclama «voluntad política» para superar una asignación de recursos «escandalosamente ineficiente» que no sería difícil de corregir para impulsar el crecimiento futuro. Así, apunta que España está sufriendo «con creces» las serias dudas que provocan un anémico crecimiento, un elevado desempleo y una población envejecida.
Por el contrario, subraya que todo apunta que España se mueve en la dirección correcta, ya que las preocupaciones sobre su financiación se han aliviado y los pasos dados en materia de reforma laboral continúan ayudando a unas exportaciones «ya fuertes».
Además cree que, aunque los elevados impuestos son parte de la actual realidad, no deben durar mucho, ya que si España quiere impulsar su economía y entrar en una senda de mayor crecimiento debe revertir las subidas de impuestos de los últimos años y compensarlas con recortes del gasto, que son menos dolorosos para el consumo.
Por otro lado, JP Morgan señala que las pequeñas y medianas empresas (pymes) españolas se están enfrentando a costes de financiación «innecesariamente elevados», que han tenido efectos «indeseables» tanto en las compañías como en los bancos, pero cree que está situación no durará mucho tiempo.
«Esta es una situación que claramente los reguladores pueden cambiar y su voluntad para hacer es evidente, ya que el tema está a la cabeza de las conversaciones del Banco Central Europeo (BCE)«, agrega la entidad, que además subraya que España es un país que «tiene algo que ofrecer», debido a la competitividad e internacionalización de su economía.
En este contexto, JP Morgan considera que hay «diamantes» entre las empresas cotizadas españolas de capitalización media, que presentan balances sólidos, por lo que considera que representan oportunidades atractivas de compra para los inversores.
Entre esos «diamantes», la entidad estadounidense señala a Vidrala, Tubos Reunidos, Ence, Miquel y Costas, Fluidra, CAF, Prosegur, CIE, Atresmedia, Mediaset España, Laboratorios Rovi y Let’s Gowex.