La balanza de pagos por cuenta corriente española cerró 2014 con un superávit de 8.491 millones de euros (8.631 millones de dólares al cambio actual), que equivale al 0,8 % del PIB, según ha señalado el Banco de España. Este superávit es el segundo de toda la serie histórica.
La economía española tuvo una capacidad de financiación exterior de 1,2 % del PIB, aunque fue inferior a la registrada en 2013 (2,1 % del PIB).
El organismo ha precisado que es evolución fue consecuencia de la disminución del superávit tanto de la balanza por cuenta corriente como, en mucha menor medida, de la de capital.
El Banco de España subraya que la economía española registró el año pasado un superávit exterior por tercer año consecutivo, después de que en 2011 la necesidad de financiación fuera de 2,8 % del PIB.
El déficit de la balanza comercial aumentó 2 % del PIB, debido a la disminución del superávit no energético, mientras que la balanza de servicios registró un superávit de 4,6 % del PIB, impulsada por el turismo.
El BdE también ha precisado recientemente que la balanza de pagos por cuenta corriente registró un déficit de 1.514 millones de euros entre enero y marzo de 2015, una cifra que disminuye más del doble respecto al mismo periodo del año anterior, donde se alcanzó un saldo negativo de 3.677 millones.
Esta evolución en la balanza se debe fundamentalmente al buen comportamiento de las transacciones de bienes y servicios, que alcanzaron los 4.670 millones frente a los 3.109 a los que se llegó en 2014, ya que el déficit de la balanza de rentas primarias y secundarias se mantuvo prácticamente estable, con un saldo negativo de 6.184 millones.