En una propuesta que ha causado reacciones mixtas, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy ,se ha planteado durante una cumbre extraordinaria de la Unión Europea la posibilidad de que en un futuro la organización pueda retirar el derecho a voto e intervenir en los presupuestos de aquellos países que manejan políticas económicas irresponsables, y se volvió a mostrar a favor de los polémicos eurobonos, que siguen siendo vistos con malos ojos por Alemania.
«Tenemos que analizar si hemos de crear casos extremos para más sanciones, como la suspensión del derecho de voto, la suspensión de fondos estructurales o de otros pagos, u el otorgar poderes a una autoridad central para que intervenga en los procesos de los presupuestos nacionales», ha afirmado Van Rompuy durante la cumbre. Pese a esto, el funcionario se apresuró a declarar que los parlamentos serán quienes sigan teniendo la última decisión sobre los presupuestos, pero aseguró que tendrán que tener más en cuenta las distintas normas europeas.
Van Rompuy también planteó la posibilidad «de avanzar hacia una mutualización limitada de la deuda pública», lo que hace referencia a los eurobonos, un instrumento a cuya creación el gobierno de Alemania se opone por el temor de que aumente los costos de financiamiento y le quite presión de encima a aquellos países que necesitan hacer reformas en sus políticas económicas. El presidente del Consejo Europeo aseguró que también se estudia la armonización de algunos impuestos y las políticas sociales.
Estas propuestas probablemente serán presentadas en el mes de Diciembre durante la próxima reunión de líderes de la Unión Europea, y de salir todo como se prevé, se aprobarán durante los meses de Marzo y Junio del próximo año. La aprobación de estas medidas podría requerir ciertas modificaciones al Tratado de Lisboa.