Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), ha advertido que la economía de la eurozona «podría volver a empeorar antes de mejorar», si bien ha asegurado que los riesgos más graves ya han pasado.
«La perspectiva está empañada de riesgos, tanto viejos como nuevos. Existen preocupaciones conocidas de que la situación en Europa podría empeorar antes de mejorar, así como en torno a la cuestión pendiente del techo de deuda en Estados Unidos«, aseguró Lagarde en un discurso centrado en Europa del Este y Rumanía.
En esta línea, la directora gerente del Fondo apuntó que otro de los riesgos para la economía global es que la ralentización del crecimiento en los mercados emergentes dure más de lo que se prevé.
Según Lagarde, este hecho refleja al mismo tiempo aspectos internos, como unas condiciones más duras del crédito o limitaciones estructurales al crecimiento, y factores externos, como una demanda global más débil y las dudas sobre la estabilidad financiera.
Asimismo, señala que tanto las economías avanzadas como las emergentes deben estar pendientes del riesgo de que continúen las actuales turbulencias en los mercados, e incluso empeoren. En concreto, apunta que un aspecto clave será la retirada de la política monetaria no convencional, donde una comunicación «clara y progresiva es crítica».
Por otro lado, la exministra de Finanzas francesa remarca que no calificaría la actualización publicada la pasada semana de las perspectivas globales de FMI como «malas noticias», aunque reconoce que le hubiera gustado que las noticias «hubieran sido mejores».
Así, señala que la buena noticia es que los riesgos más extremos para las perspectivas económicas «parecen haber pasado», pero advierte de que todavía existen «muchos baches en el camino hacia un crecimiento global fuerte y sostenido».
En este sentido, recuerda que el FMI prevé que la economía global crezca un 3,1% en 2013, una cifra similar a la de 2012 pero inferior a la previsión que publicó en abril, debido a la continuada recesión en la eurozona y un crecimiento «más débil» de lo previsto en muchas de las economías emergentes claves.
Lagarde ha remarcado que los países emergentes y en desarrollo fortalecerán la economía global, ya que crecerán alrededor de un 5% en 2013. Asimismo, ha señalado que el crecimiento también se encuentra en términos positivos en otras regiones, como por ejemplo, en EE.UU., donde no obstante, existe el riesgo de que el ajuste fiscal lastre el comportamiento de la economía.