Según la segunda estimación del Producto Interior Bruto (PIB) publicada por Eurostat, la economía de la eurozona ha experimentado en el primer trimestre del año una expansión del 0,4%, en línea con el último trimestre de 2014.
En comparación con el mismo periodo del año pasado, la economía de la eurozona creció un 1%, después de registrar una expansión interanual del 0,9% en el trimestre anterior.
En el conjunto de la Unión Europea (UE), la estimación ha señalado que la economía creció también a un ritmo del 0,4%, en línea con el crecimiento del cuarto trimestre de 2014. En términos interanuales, el PIB de la UE aumentó un 1,5% desde el 1,4% del trimestre final del año 2014.
Entre los países de la UE, las mayores tasas de crecimiento trimestral se observaron en República Checa (+3,6%), Chipre y Rumanía (+1,6% en ambos casos), Polonia (+1%), por delante de España y Bulgaria (+0,9% ambos).
Por el contrario, Lituania (-0,6%) y Estonia (-0,3%) registraron los datos más negativos de evolución del PIB, por delante de Grecia (-0,2%) y Finlandia (-0,1%), que han vuelto a entrar en recesión.
En el caso de Alemania, el PIB registró una expansión del 0,3% en el primer trimestre, frente al 0,7% del trimestre final de 2014, mientras Francia creció un 0,6% desde el estancamiento del cuarto trimestre de 2014 e Italia logró volver a crecer con una expansión del 0,3%, tras la parálisis económica de finales de 2014.
De esta manera, la economía de la eurozona ha logrado superar en el primer trimestre el ritmo de crecimiento observado en otras grandes economías como Estados Unidos (-0,2%) y Reino Unido (+0,3%), aunque por detrás del 0,6% de Japón.