La Sareb ha informado que reforzará su capital por 2.170 millones de euros gracias a sus socios, entre ellos el Estado y la mayor parte de los bancos.
De esta manera, la Sareb podrá cumplir con las nuevas exigencias regulatorias y hacer frente a sus pérdidas.
Esta semana, los accionistas de la sociedad han aprobado en junta convertir en capital deuda subordinada por importe de 2.170 millones de euros, según ha explicado en una nota la compañía.
El comunicado añade que este hecho privará a todos los accionistas de poder recibir los futuros intereses que generaría esa deuda subordinada, pero será suficiente para que Sareb pueda hacer frente con sus propios recursos a las pérdidas por el saneamiento sus activos.
Sareb destaca que de esta manera no será necesario que sus socios desembolsen más dinero mediante nuevas aportaciones de capital, más allá de las efectuadas al constituir la sociedad, lo que limita la aportación pública y de los bancos a Sareb.
Tras esta operación, la participación del Estado seguirá siendo del 45% y el resto continuará en manos de bancos, aseguradoras y una eléctrica; los recursos propios pasan a formarlo 953 millones en capital y 1.429 millones en obligaciones subordinadas.
Por otro lado, la junta de accionistas de Sareb ha aprobado el nombramiento de Javier García-Carranza como consejero dominical en representación de Banco Santander.
El presidente de la entidad, Jaime Echegoyen ha hecho un balance de los tres primeros años de vida de Sareb, y ha resaltado que ha supuesto un ahorro de más de 200 euros a cada español.
Echegoyen ha recordado que desde 2012 y hasta el pasado mes de febrero, la compañía ha amortizado más de 7.600 millones de euros, una cantidad que, sumada a los intereses, ha permitido un ahorro equivalente a 227 euros por cada español.