El Banco de México (Banxico) ha señalado esta semana que el flujo de remesas que entró en el país durante el pasado mes de enero sumó 1.631 millones de dólares (1.458 millones de euros), lo que supone una caída del 0,7% respecto al mismo mes de 2014.
Con este dato, se rompe una racha positiva de 17 meses seguidos de crecimiento de las remesas en tasa interanual. Si se compara con las cifras de diciembre de 2014, se evidencia una caída del 27,02% en los ingresos, frente a los 2.234 millones de dólares (1.997 millones de euros) que se recibieron en el último mes del pasado año.
México cerró 2014 con el mayor ingreso de dinero en remesas para un mes de diciembre de los últimos siete años, con un monto total de 2.196 millones de dólares (1.964 millones de euros).
Los analistas estiman que, sin importar la caída en las remesas de enero, éstas se recuperarán en base a la previsión de que continúe la mejora en el mercado laboral estadounidense, principal origen del dinero de las remesas que llegan a México.
Pese a que es frecuente que en enero el envío de divisas sea mucho menor que en diciembre, el dato de Banxico desconcertó a los analistas, que esperaban un ingreso de 1.731 millones de dólares (1.548 millones de euros), lo que hubiera significado un crecimiento del 5,4% en tasa interanual.
La caída de ingresos por remesas ha sido la mayor desde noviembre de 2008, cuando retrocedieron un 33,57%, al pasar de 2.637 millones de dólares (2.358 millones de euros) a 1.752 millones de dólares (1.567 millones de euros).
Banxico ha destacado que los mexicanos radicados en el extranjero enviaron un promedio de 279 dólares (249 euros) al mes, un 4% menos que en el mismo periodo de 2014.