La agencia de calificación Standard & Poor’s ha rebajado a ‘negativa’ desde ‘estable’ la perspectiva de la nota de solvencia ‘BBB’ de Brasil como consecuencia del menor ritmo de crecimiento y el elevado endeudamiento de los hogares, que se traduce en un menor consumo, lo que implica la posibilidad de un recorte de la calificación brasileña en los dos próximos años.
La economía de Brasil probablemente registrará su tercer año de crecimiento «modesto», señaló la agencia en un comunicado, donde augura que el PIB brasileño crecerá un 2,5% este año, después de hacerlo un 0,9% en 2012 y un 2,7% en 2011.
«Este débil crecimiento refleja el modesto comportamiento de las exportaciones, así como el descenso de las inversiones del sector privado, en parte como consecuencia de las ambiguas señales de las políticas del Gobierno, que han dañado la confianza», indicó el analista Sebastian Briozzo.
«El riesgo de una mayor persistencia de lo previsto de la caída del gasto doméstico en un contexto de elevado endeudamiento de los consumidores también pesa en las perspectivas de crecimiento de Brasil», añadió.
De este modo, S&P advierte de que la ralentización del crecimiento de Brasil ha contribuido a un modesto deterioro del perfil de crédito del emisor soberano, incluyendo un empeoramiento de su cuenta fiscal y un incremento de la deuda pública.
«La perspectiva «negativa» refleja al menos un tercio de posibilidades de que un incremento de la deuda del Gobierno y la erosión de la estabilidad macroeconómica conlleven una rebaja del ‘rating’ de Brasil en los dos próximos años», precisó el analista.
De este modo, la nota de solvencia a largo plazo de Brasil (BBB/Negativa) se mantiene un peldaño por encima del ‘rating’ otorgado por S&P a España (‘BBB-‘/Negativa), un escalón por encima del grado especulativo o ‘bono basura’.