Abanca ha obtenido un beneficio de 266 millones de euros hasta el mes de septiembre, lo que supone una caída del 22,2% si se compara con el dato del mismo periodo de 2014.
Abanca ha atribuido este resultado al crecimiento de los ingresos recurrentes, la “buena evolución” del margen comercial, la mejoría de la calidad del crédito y la fortaleza de los ratios de capital y liquidez.
El beneficio antes de impuestos se ha ubicado en 342 millones de euros, lo que representa un 27,8% menos que el registrado hasta septiembre del año 2014, cuando alcanzó los 474 millones de euros.
En la presentación de los resultados del primer semestre de este año, el consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, atribuyó la bajada en los beneficios respecto al mismo periodo de 2014 a que las cifras de hace un año se presentaron por una reestructuración de la cartera de renta fija, es decir, a operaciones atípicas que dieron lugar a esos resultados, mientras que ahora se centran en el negocio habitual.
En este sentido, Abanca ha destacado que el tercer trimestre de este año “ha estado marcado por nuevos crecimientos de la actividad con clientes minoristas, tanto en la concesión de crédito como en la captación de depósitos, y en la comercialización de fondos de inversión, planes de pensiones y seguros”.
En relación al margen comercial, Abanca ha obtenido un aumento del 10% en relación al primer trimestre, apoyado en el incremento del volumen y el control de los precios.
De esta forma, el margen comercial aumenta por segundo trimestre consecutivo y los ingresos por prestación de servicios se elevan a 126 millones de euros (+7,5%), “debido al buen ritmo de comercialización de los principales productos de valor añadido”.
Por otro lado, los ingresos por comercialización de seguros se han elevado un 43%. Los ingresos por pasivos fuera de balance se han incrementado en torno al 27% y por activos, un 19%. De este modo, la rentabilidad de Abanca se ubica hasta septiembre en el 8,82%.