Varios bancos de EE.UU., entre ellos JP Morgan Chase y al menos otras cuatro entidades, han sufrido ciberataques coordinados durante el presente mes de agosto, según han señalado fuentes relacionadas con la investigación al diario «The New York Times«.
Los piratas informáticos accedieron a grandes cantidades de datos bancarios, incluida información de las cuentas de ahorro de los clientes, según estas fuentes.
El FBI forma parte de la investigación que busca determinar el origen de este elaborado ciberataque, y si la motivación que hay detrás de él es simplemente económica o se enmarca en una operación de Inteligencia o espionaje internacional.
«Las empresas de nuestro tamaño desafortunadamente sufren ciberataques casi cada día. Tenemos numerosas maneras de defendernos de estas amenazas y vigilamos constantemente si ha habido fraude real», explicó al New York Times Patricia Wexler, una portavoz de JP Morgan.
Según los expertos en seguridad cibernética consultados por el diario estadounidense, por el momento no hay evidencia de que exista una motivación política detrás de los ataques perpetrados este mes de agosto, ni se ha hallado vinculación alguna con países como Rusia o Irán.
El sector bancario estadounidense ha sido un objetivo frecuente de los piratas informáticos en los últimos años, aunque la mayoría de los ataques tuvieron un móvil económico.
No obstante, puesto que no hay evidencias de fraude tras los ciberataques, las autoridades no descartan ninguna hipótesis.