Bankia y la ONG Plena Inclusión han puesto en marcha el proyecto ‘Finanzas Fáciles’, en el que 36 profesionales de Bankia, de forma voluntaria, reciben formación por parte de profesores y usuarios de Plena Inclusión para poder impartir, después, clases de educación financiera a personas con diferentes capacidades. Además de su tiempo, los profesionales de Bankia ofrecen sus conocimientos y su experiencia.
‘Finanzas Fáciles’ se desarrolla con voluntarios que trabajan en oficinas y que tienen trato directo con el público.
En una primera fase, los voluntarios reciben formación impartida por profesionales que tienen diferentes capacidades y que pertenecen a Plena Inclusión. Aprenden qué es la discapacidad intelectual, así como el desarrollo, derechos, implicaciones legales y sociales y necesidades de estas personas.
Una vez terminada esta formación, los voluntarios se convierten en profesores para dar clases de educación financiera a los usuarios de Plena Inclusión, acerca de las cuestiones que más les afectan o preocupan, adaptadas para que sean de fácil comprensión. Les enseñan, conocimientos básicos y útiles en su día a día, como qué es una tarjeta bancaria o una cuenta de ahorro, cómo se domicilia un recibo o con qué productos se puede ahorrar.
«El entorno financiero es algo con lo que tienes que convivir tengas discapacidad intelectual o no. Ya teníamos experiencias previas en torno a productos financieros y queríamos hacer un proyecto a nivel estatal. Esto lo unimos con un proyecto de voluntariado corporativo de Bankia y para este programa piloto identificamos tres zonas geográficas y desarrollamos el proyecto», explica Laura Espejo, adjunta a dirección de Plena Inclusión.
El proyecto se ha desarrollado en Valencia, además de en Logroño y Madrid. En cada uno han participado 12 voluntarios de Bankia y dos formadores de Plena Inclusión, uno de ellos con discapacidad intelectual.