ParaBankia y el resto de entidades españolas, el 31 de marzo, fecha límite dada por el gobierno para que el sistema financiero español sanee sus cuentas está a la vuelta de la esquina y la situación de Bankia debido a su gran tamaño y su peso en el sistema es crítica. El gobierno tendrá que enfrentarse a un gran problema si Bankia cae. Caja Madrid se encuentra en crisis y la fusión entre Bankia y La Caixa, que podría haber solucinado el problema no llegó a producirse por diversos motivos, pero el principal sería que a ninguna de las entidades le interesaba el acuerdo desde el punto de vista financiero. Tanto La Caixa como Bankia son tan grandes que su fusión sería muy complicada y problemática. Elegir entre Madrid o Barcelona para implantar la sede era uno de los temas más difíciles a tratar con el reparto de poder entre los dos el Presidente de Bankia, Rodrigo Rato y el Presidente de La Caixa, Isidro Fainé. Demasiados problemas para alumbrar un gigante que sumaría 560.000 millones de euros en activos, más de 8.000 oficinas y más de 50.000 empleos
La cuestión es que con el impacto de la última reforma del sistema financiero aprobada por el Gobierno que obliga a las antiguas Cajas de Ahorro y al resto de entidades financieras a aumentar sus fondo de provisiones y el deterioro de la cartera inmobiliaria por la caída constante de los precios de los pisos, ha colocado a Bankia en una situación muy difícil y registrará pérdidas a finales de 2012 si no vende activos.
El Gobierno se encuentra preocupado por Bankia y ha dado orden al Ministerio de Economía y al Banco de España de buscar soluciones, donde prima la fusión de le entidad con otra u otras.