La Comisión Europea va a estudiar la nacionalización del Banco Financiero y de Ahorros (BFA), matriz de Bankia, por parte del gobierno de España. Concretamente, está bajo investigación si la recapitalización con ayudas públicas de Bankia supone una injerencia del ejecutivo en el libre mercado.
En este caso, la decisión del gobierno español necesitaría la autorización europea para poder llevarse a cabo. Además, supondría que el ejecutivo dirigido por Mariano Rajoy debería remitir a Bruselas un informe sobre el plan de reestructuración de la entidad financiera.
En 2010, la comisión comunitaria ya dio su aprobación a la partida de ayudas que el gobierno entonces socialista concedió a Bankia. Ahora, si el estudio de la Comisión Europea, así lo prescribe, la conversión de estas ayudas en forma de acciones, es decir, el plan de nacionalización diseñado por el gobierno, también requerirá una nueva autorización.
El estudio de la Comisión Europea se enfocará, pues, en el procedimiento de canje de las ayudas por participaciones.
El Ministerio de Economía ha querido inyectar capital en Bankia con el fin de tranquilizar a los accionistas y clientes, y, así mismo, para dotar de mayor estabilidad al sector financiero.
Así, la participación del Estado en el capital del BFA estará muy cerca del 100% de su capital.