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jueves, abril 18, 2024
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Novagalicia pide 6.000 millones de ayuda pública

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José María Castellano, presidente de Novagalicia (NCG) Banco y César González-Bueno, consejero delegado, han comunicado que la entidad ha pedido ayuda pública  por un total de 6.000 millones de euros, los cuales cubren “con exceso” sus necesidades. Además, tienen la seguridad “absoluta”  de que el banco podrá seguir en solitario y que a medio plazo no se espera ni su liquidación ni su subasta.

En una rueda de prensa para presentar la campaña de Novagalicia para «pedir perdón» por los errores en la gestión de la antigua caja, los directivos han destacado que la ayuda se articulará en forma de capital y su cantidad está razonada en los planes de saneamiento presentados ante el Banco de España.

En cualquier caso, han apuntado que la cuantía precisa de fondos europeos que se inyectará quedará concretada en septiembre, cuando estén disponibles los resultados de las auditorias independientes de las entidades a escala individual.

La capitalización se materializará en octubre «previsiblemente», aunque el pacto con la UE establece que parte de la ayuda esté disponible desde este mismo mes de julio, ha indicado el número dos de la entidad.

Ambos directivos de NCG Banco han insistido en que no albergan dudas respecto a la continuidad del proyecto y en que todas las entidades españolas se mantendrán.

A este respecto, el consejero delegado ha indicado que la UE sitúa a las entidades controladas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en el grupo ‘uno’ del memorando de la UE y distinguirá entre ellas las viables de las no viables. «Hay unos criterios establecidos que superaremos con creces», ha afirmado.

Además, ha argumentado que para Galicia la entidad es «sistémica en el buen sentido» de la palabra y contribuye «extraordinariamente» a la Comunidad, que sin su participación –«con indirectos representa un 8% del PIB«–, la autonomía «no sería la misma».

«Parece claro que esta entidad está haciendo los deberes, es  viable y de las que, sin duda, seguirá adelante. Creo que seguirán todas, pero de no seguir alguna, seguro que no es ésta, con seguridad absoluta», ha aseverado González-Bueno.

Castellano, por su parte, ha incidido en que los inversores privados mantienen su interés en la entidad, si bien ha rehusado concretar la cantidad que podrían aportar, con el argumento de que la situación cambiante no permite establecer una cifra concreta.

«Así lo hemos planteado –que entren también socios privados– y creemos que es bueno que se combine capital público con capital privado, eso daría además una estabilidad», ha razonado. En este sentido, ha defendido que estos socios constituirían un «capital semilla» que ayudaría en el proceso «inexorable» de privatización, que prevén acometer mediante una salida a bolsa.

El presidente ha destacado que no ve «nada negativo» en esta vía, que permitiría devolver «ya» la aportación de recursos de la primera oleada de recursos públicos (FROB I) recibidos.

El propio memorando de la UE establece los mecanismos de privatización y pregunta específicamente a las entidades por la intención de salir a Bolsa. En este proceso, los socios privados servirían de referencia para fijar el precio. «El objetivo de la UE no es que la entidad permanezca con el capital público», ha señalado González-Bueno.

Sobre la entrada de estos fondos de inversión, han considerado que existirán dos «oportunidades» para su entrada: una de ellas sería en paralelo o tras la recapitalización y la otra en el momento previo a la salida a bolsa que se plantean para privatizar el banco. González-Bueno ha defendido que «justo después» de la entrada de la ayuda pública es un momento «perfectamente adecuado», aunque dependerá de que la entidad y los inversores lleguen a un acuerdo. El que entra primero, ha añadido, tiene una mejor oportunidad de hacer «una buena inversión».

Ha insistido en que la entrada será, si se ejecuta, cuando «se calmen las aguas», algo que ocurrirá a finales de año, según la opinión del consejero delegado, que se remite al plan temporal de la UE, que fija objetivos mes a mes y por quincenas.

Castellano ha apuntado que los fondos enviaron cartas de interés al Banco de España –«no una, sino varias», ha destacado– y para mostrar que ese interés existe han relatado una anécdota: la pasada semana y la anterior se produjeron dos visitas y en una de ellas, en Vigo, los representantes de los inversores vieron una manifestación de afectados por las preferentes. «Les dijimos: tenemos un problema», han indicado y el presidente ha agregado que «como un americano no se distingue de un español», presenciaron la movilización y recomendaron dar solución al conflicto.

Preguntado sobre el interés de empresarios gallegos, el presidente de NCG Banco ha destacado que la entidad está interesada en fondos que ya hayan comprado bancos «en la misma situación» y, por lo tanto, tengan experiencia en el ámbito.

Castellano ha admitido que «seguro», la inyección de ayudas de la UE llevará a que exijan más ajustes de plantilla y oficinas, pero ha subrayado que «gran parte del trabajo está hecho». «Somos el banco que más oficinas hemos cerrado y que más personal hemos reducido. No sé lo nuevo que nos exigirán pero hay un camino que ha hemos recorrido, con sufrimiento», ha replicado.

También ha reconocido que el valor de la entidad se revisará con esta inyección y la participación de los actuales socios –empresarios gallegos y Novacaixagalicia– se verá previsiblemente diluida. Habrá una ampliación de capital en la que los accionistas tendrán derecho preferente de suscripción de nuevas acciones, ha señalado y ha concluido que «cada uno tomará sus decisiones». «La caja tendrá una limitación para aumentar su participación porque tiene unos recursos limitados, pero a lo mejor se queda con menos porcentaje pero de una entidad que vale más», ha apuntado.

El futuro, han agregado los dos directivos, se presenta «complicado» y resultados del primer trimestre no han sido «brillantes». En este escenario no esperan un buen resultado en 2012, con los efectos de los decretos y la recapitalización, pero prevén que la entidad «saneada» entre en beneficios en 2013.

Admiten una salida de depósitos, pero sostienen que «sorprendentemente», NCG Banco ha perdido pocos clientes e incluso ha ganado algunos. Además, han asegurado que Novagalicia «está dando crédito».

Otro de los asuntos pendientes de la entidad es el futuro del Banco Gallego, en el que controla prácticamente el 50%. Su salida –puede integrarse en NCG Banco, venderse o fusionarse con otra entidad– no se conocerá hasta que no termine el plazo dado por el Banco de España. La decisión, han indicado, no está tomada.

Sobre la separación en un ‘banco malo’ de los activos inmobiliarios problemáticos, Castellano y González-Bueno han aclarado que trabajan en este aspecto y que están de acuerdo con esta medida. El proceso, han agregado, aún no está definido.

 

 

 

 

 

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