La asamblea general de BBK ha aprobado unos presupuestos para su obra social de 32,8 millones de euros en este año, la mitad de lo presupuestado en el 2012, cuando fueron 64,9 millones de euros.
Las tres cajas de ahorro vascas han celebrado sus asambleas generales que, tras su integración en Kutxabank, se han centrado en la obra social, ya que el negocio financiero quedó en manos del banco, cuyo funcionamiento no se debate en estas asambleas.
Las cajas dedican un 30% de los beneficios a su obra social, aunque el presidente, Mario Fernández, ha anunciado hoy que ha pedido permiso al Banco de España para dedicar la totalidad de los beneficios de la BBK a la obra social.
Los recortes son consecuencia del descenso del beneficio: el año pasado, Kutxabank obtuvo un beneficio neto consolidado de 84,6 millones de euros, es decir un 65,5% menos que en 2011, una bajada que traslada ahora a las obras sociales de las cajas.