Royal Bank of Scotland (RBS) ha llegado a un acuerdo con la mayor parte de los grupos de accionistas que aseguraban haber sido engañados durante una recaudación de fondos en plena crisis financiera.
No obstante, la entidad financiera ha señalado que aún debe establecer un trato con miles de inversores que son mucho más pequeños.
RBS ha explicado en un comunicado que ha logrado fijar un acuerdo con tres de los cinco principales grupos de inversores en la demanda para pagar unos 800 millones de libras esterlinas (931 millones de euros) que se van a dividir entre los cinco grupos.
Royal Bank of Scotland está uniendo esfuerzos para también llegar a un acuerdo con los otros dos grupos, con el propósito de evitar que el caso termine en un juicio en marzo del próximo año 2017. Los inversores habían levantado acusaciones contra la entidad financiera británica al no darles una imagen veraz sobre sus finanzas durante una recaudación de fondos que se presentó en el 2008.
Estos inversores perdieron la mayor parte de su dinero cuando Royal Bank of Scotland estuvo al punto del colapso pocos meses después y tuvo que ser rescatado por el Gobierno británico, una acción que le terminó costando a los contribuyentes más de 45.000 millones de libras.
El acuerdo que se ha celebrado esta semana incluye arreglos con grandes instituciones que adquirieron cerca de un 10 % de la emisión de acciones en el 2008, tales como Standard Life, Legal & General, Aviva, Prudential y el Universities Superannuation Scheme (USS).