El nuevo presidente ejecutivo de Crédit Agricole, Philippe Brassac, ha dejado su marca este martes con una reorganización de su gerencia.
Philippe Brassac, con apenas dos meses en el cargo, ha informado que va a reorganizar las líneas de negocio de la entidad con el objetivo de que reporten directamente a la alta dirección. En este sentido, ha creado nuevos puestos a cargo de funciones para todo el grupo.
Estos cambios se presentan en momentos en que la entidad bancaria francesa se acerca a un acuerdo extrajudicial con las autoridades de Estados Unidos sobre posibles violaciones de sanciones.
El CEO de Crédit Agricole ha señalado en su primera conferencia de prensa que “queremos tanto adaptar al grupo y obtener un mejor rendimiento y competitividad”. Asimismo, ha agregado que “tenemos una visión cautelosa del entorno económico y financiero. Creemos que la crisis potencial no ha sido completamente eliminada”.
Los resultados de la entidad financiera correspondientes al segundo trimestre de este año, muestran que su ganancia neta se ha elevado a 920 millones de euros desde los 17 millones de euros en el mismo período del año anterior. Su cifra de negocio también ha aumentado hasta los 4.628 millones de euros, lo que representa un incremento del 18,1%. La cifra de negocio para el primer semestre del año se ha ubicado en 8.987 millones de euros, un 12,7% más que el año anterior.
Crédit Agricole ha reservado unos 350 millones de euros adicionales para provisiones judiciales, de modo que el total reservado para litigios ha ascendido a 1.600 millones de euros.