BBVA, presidido por Francisco González, puso en marcha a finales de 2015 ‘La revolución de la pequeñas cosas’, una campaña con la que lanzaba la contratación de productos financieros a través de su app y ofrecía la posibilidad de disponer de efectivo en los cajeros del banco sin necesidad de tarjeta, entre otras funcionalidades. En la actualidad, sus clientes domicilian una media de 1800 recibos al mes a través de su teléfono móvil.
Fuentes de la entidad han declarado que BBVA ha liderado la transformación de la banca y ha desarrollado nuevas opciones digitales para que los clientes se puedan relacionar con su gestor personal a través de diferentes canales, sin importar la hora o el lugar.
El ‘banco azul’ dispone desde 2009 con un servicio de gestión denominado BBVA Contigo que cuenta con 840 gestores y que suma más de 600.000 usuarios. Para poder acceder a este servicio, el cliente solo tiene que solicitar el alta a través de la web o de la app.
Una vez asignado un gestor personal, el cliente puede hacer las gestiones a través del correo electrónico o llamando directamente desde la app. La llamada será identificada, por lo que no serán necesarias claves de identificación adicionales. El gestor conocerá quién es y en qué punto de la navegación se encuentra el cliente.
Otra de las novedades de esta campaña fue la posibilidad de disponer de efectivo en los cajeros del banco, sin necesidad de tener tarjeta, gracias a la funcionalidad ‘efectivo móvil’ de la app de BBVA. En junio de este año, 13.799 clientes se beneficiaron de esta opción.
‘La revolución de las pequeñas cosas’ también permite a los clientes pagar directamente con el smartphone si tienen todas sus tarjetas en BBVA Wallet, firmar sus contratos a distancia y apagar y encender sus tarjetas a través de la citada app, así como decidir qué tipo de pagos permiten con su tarjeta.